Durante el Festival de Televisión de Edimburgo, Charlie Brooker, creador de ‘Black Mirror’, expresó su temor a que la IA sea usada por los estudios para dar notas de guion y reflexionó sobre la evolución de la serie desde su llegada a Netflix.

Charlie Brooker, la mente detrás de ‘Black Mirror’, volvió a encender la conversación sobre el futuro de la inteligencia artificial y su impacto en la industria del entretenimiento. Durante su participación en el Festival de Televisión de Edimburgo, el guionista advirtió sobre un escenario que preocupa a muchos en Hollywood: que los estudios comiencen a usar IA para revisar guiones y proponer cambios creativos.
Según explicó, los ejecutivos podrían alimentar un guion a un modelo de inteligencia artificial para generar un AI animatic, es decir, una versión animada preliminar de la historia. A partir de ahí, las modificaciones se sugerirían no por un creativo humano, sino por la máquina. “El guion se convierte en un simple prompt. Eso me preocupa”, afirmó Brooker.
A pesar de ello, el creador de ‘Black Mirror’ aseguró que no cree que los escritores vayan a ser reemplazados por completo: “Las máquinas no pueden replicar las experiencias humanas que hacen única a la narrativa. Espero que aún quede trabajo para mantener los teclados calientes con carne y hueso”.

El escritor también habló sobre la evolución de la serie tras su llegada a Netflix, recordando que algunos seguidores insisten en que las primeras temporadas británicas eran “más oscuras y auténticas”. Como respuesta, decidió arriesgarse con un giro inesperado en el episodio ‘San Junipero’, donde probó contar una historia con un tono optimista. El resultado: uno de los capítulos más aclamados y premiados de la franquicia.
La séptima temporada de ‘Black Mirror’, estrenada en abril, fue celebrada como un regreso al estilo que conquistó a la audiencia, aunque hasta el momento no hay confirmación oficial de una temporada 8. Los fans, mientras tanto, se mantienen atentos a cuál será la próxima apuesta de Brooker: ¿volverá a la crudeza distópica o seguirá sorprendiendo con nuevos caminos narrativos?