‘El Aprendiz’: no es solo otro biopic | Crítica

Un biopic sobre Donald Trump. ¿Alguien en Perú o Latinoamérica quiere ver eso? Después de ver la cinta puedo responder: deberían.

donald trump el aprendiz jeremy strong sebastian stan
Foto: Briarcliff Entertainment

Y si son fans de las películas de Marvel, otra motivación es su actor principal: Sebastian Stan, quien encarna a Donald Trump en este biopic que promete y no promete ser la película de la que se hablará durante la premiación de los Oscars 2025, dependiendo de si el verdadero Donald Trump gana las elecciones en Estados Unidos este año.

‘El Aprendiz’, primera película en inglés por el director Ali Abbasi, trata sobre la vida de un joven Donald Trump en los años 70-80 en Nueva York, donde encuentra tutelaje por parte de Roy Cohn, un abogado despiadado quien lo molda hasta convertirse en el Donald Trump que conocemos hoy.

Por cierto, yo pienso que el tagline debería ser: La película que Donald Trump no quiere que veas, porque llegó a tal extremo de mandar una carta de cese y desista a Cannes para evitar su estreno. (El tagline es “Una historia de horror americana.”)

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Foto: Briarcliff Entertainment

¿Quién es Donald Trump?

Si estudiaron Negocios, seguro conocerán el libro “El arte de la negociación” escrito por él. Si son Gen X o Millenials, lo conocerán como el señor que ayuda a Macaulay Culkin en ‘Mi Pobre Angelito 2’, el que gilea con los ojitos a Samantha en ‘Sex and the City’, o el que le metió cabe a Vince McMahon en WWE (Y un montón de cameos más en el cine, televisión, videos musicales, y comerciales, que esta humilde servidora no puede completamente listar porque solo tiene un límite de palabras para este artículo). Y si son Gen Z o Alpha, lo conocen por ser ese señor senil con el gorrito rojo que para gritando MAGA y a quien recientemente le metieron bala.

Es notorio el declive en la popularidad de este magnate de los negocios con los gremios de arte estadounidenses en las últimas décadas. ¿Qué cambió? Tendría que escribirles un análisis sociopolítico cultural para comprender esto. Pero no estamos aquí para analizar su vida, sino el biopic sobre su vida (a.k.a. me va a caer si ya no voy a grano).

La cinta explora quién es Donald Trump por fuera y por dentro, y de dónde nació esa naturalidad de ser doble cara, y no por ser géminis. Pero la razón por la que esta película funciona es porque no es solo simplemente otro biopic sobre otra persona famosa.

Por un lado, ‘El Aprendiz’ nos muestra a un Donald joven todavía buscando su camino en el mundo inmobiliario. Por otro lado, explora temas como el capitalismo, el poder y la riqueza, mostrando lo sencillo que es caer en su influencia cuando uno es joven y ambicioso. Un mundo donde es necesario pisotear al resto para alcanzar el éxito y utiliza al personaje de Donald Trump para mostrar este punto.

El guionista Gabriel Sherman nos plantea el arjé de Trump. Sin Roy Cohn no habría MAGA Trump. El notorio abogado le enseña a Trump cómo ser exitoso en Estados Unidos, y él adopta estas reglas sobre corrupción, chantaje y la política estadounidense. El personaje cae mal, sus acciones son despreciables, pero al final termina teniendo un grado de humanidad que puede hacerte sentir pena por él.

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Foto: Briarcliff Entertainment

Finalmente, terminamos viendo al Donald Trump que conocemos hoy en día, a diferencia del que nos muestran al principio de la cinta. ‘El Aprendiz’ nos invita a conocer a Donald un poco por dentro, pero de manera limitada, nunca en profundidad, como el personaje de la vida real también lo evitaría.

Marvel y Succession

Quién diría que veríamos alguna vez en pantalla a Bucky y Kendall Roy juntos por Nueva York. En ‘El Aprendiz’, Jeremy Strong y Sebastian Stan nos demuestran que un rol no los encajona en su vida actoral.

La nueva estrategia de Sebastian Stan es hacer plata y arte. Plata con Marvel y “arte” con películas de menor presupuesto que lo reten como actor. Su interpretación de Trump no es caricaturesca, entiende que el personaje necesita que sus manerismos se incrementen a medida que progresa la película y Donald envejece. Da en el clavo a la cadencia, sus movimientos, incluso la manera que hace puchero con los labios.

Para aportar realismo, Stan comentó en una entrevista que subió de peso tomando Coca-Cola y comiendo un montón de sandwiches de mantequilla de maní y mermelada. Lo difícil fue la época en que decidió hacerlo. La producción de ‘El Aprendiz’ fue paralizada por la huelga de guionistas y actores, así que tuvo que dejar la dieta engorde y volver a meterse a las máquinas para su rol en ‘Thunderbolts’. Hasta que se enteró de que esa también fue suspendida, lo que significaba que tenía que volver nuevamente a la dieta gaseosas y mantequilla de maní. Sobre esta variación, su comentario para la revista GQ fue: “Tengo 41 p*tos años. Trabajé mucho para ponerme en forma ahora.”

Foto: Briarcliff Entertainment

En cuanto a Jeremy Strong, si extrañaban ver a un Roy en pantalla, no extrañen más. Su encarnación como Roy Cohn, diría yo, pesa mucho más que la de Stan (con el perdón de los fans de Sebastian). ¿Por qué? ¡Vean la película! Es asombroso cómo Strong juega en su interpretación entre la línea de ser salvajemente despreciable y ser usado y botado como chicle masticado pegado debajo de la mesa. Es triste, da pena, y en una escena de confrontación al final incluso parece que la muerte está en su cara con tan solo la mirada. Por cierto, GRAN representación LGBTQ+.

La actuación de la nominada al Oscar Maria Bakalova como la esposa de Trump, impacta y se muestra fuerte como una igual al lado de Trump. Fue buena decisión de casting elegirla dada su energía y a la vez calidez en este rol. Sin embargo, pienso que el rol le quedó chico, la quería ver más minutos en pantalla. Quizás en el futuro puedan hacer una película sobre Las Esposas de Trump al estilo de Pablo Larraín.

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Foto: Briarcliff Entertainment

Aspectos técnicos

El cinematógrafo Kasper Tuxen se encargó del aspecto visual de la cinta, conocido por su trabajo en la película ‘La Peor Persona del Mundo’ (2021). Esta vez, su estilo varía a uno de realismo, con un look vintage al principio, como si se tratara de una película de 16 mm de los 70s, por ejemplo tomas a mano, el grano en el film, o incluso la relación de aspecto 1:33:1. A medida que progresa la película, el aspecto visual cambia a uno analógico estilizado para adentrarnos a los años 80. Te hace sentir que ves algo grabado en esas épocas, en tiempo real, a diferencia de otros biopics que tienen un look más digital.

Sobre Maquillaje y Peluquería, aquí es donde más posibilidades tiene esta película de tener una nominación al Oscar. Este trabajo es sutil, pero efectivo y de manera gradual nos ayuda más a compenetrar en la evolución de Trump. Este trabajo detallado es el que quizás la academia valore con una nominación.

Foto: Briarcliff Entertainment

La película no ataca directamente a Trump, ni tampoco lo avala. Se queda en un término medio, pero hace suficiente, mantiene un equilibrio entre su crítica y su narrativa. Entretiene, eso sí, así que no hay pierde si es que deciden ir a verla. Su importancia en las rondas de los festivales y premiaciones dependerá mucho de si Donald Trump real gana o no las elecciones. Si pierde, todos se olvidarán de esta película. Pero si gana, quizás esta cinta sea usada como otra palanca más para ir en su contra y con eso, quizás alcance un par de nominaciones (adivino, maquillaje y peluquería, mejor película y guion).

¡Recomendada de todas maneras! 3.8/5 Sígueme en Letterboxd.

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